Me reuní con Jennifer en East 42nd Street para una sesión de retratos callejeros que duró más de una hora. Mi plan inicial era hacer uso de las luces de la ciudad y experimentar con técnicas de larga exposición usando un trípode compacto y un cable disparador. Estoy empezando a darme cuenta de la cantidad de contexto que la exposición prolongada agrega a los retratos callejeros, y es probable que en el futuro continúe usando esa técnica para retratar. Esta sesión de retratos comenzó justo afuera de la Terminal Grand Central en Manhattan, NY, y desde allí, continuamos nuestra sesión hacia Park Avenue, Lexington y 3rd avenue.

Con esta sesión, estaba decidido a obtener imágenes nítidas, hacer un buen uso de mi cámara de bajo píxel para obtener encuadres bien expuestos bajo luz desafiante. Excepto por el primer conjunto de fotogramas, el resto de las fotos en esta sesión fueron tomadas con ISO 800, y ese es para mí el punto óptimo antes de que el ruido digital se active en mi cámara. A medida que continuó esta caminata fotográfica, comencé a usar mi flash, que activé con un transmisor infrarrojo y lo sostuve a la distancia de mi brazo. Más que agregar luz con el flash, mi razón principal para usarlo fue evitar algún desenfoque, así que deliberadamente subexpuse mi potencia de flash por tres paradas, y eso me permitió absorber la mayor cantidad de luz ambiental posible. El flash lo calenté con un gel corrector de 1/4 y lo difuce adicionalmente para suavizar las sombras usando un domo y una bandera portátil. La sincronización a alta velocidad también fue una técnica que usé en algunas tomas, lo que me permitió usar velocidades que superaron el rango limitado de mí cámara que es 160 / seg.

Durante mucho tiempo, quise intentar con retratos nocturnos, y fue algo que puse en espera, atribuyendo mi falta de mega píxeles y lentes antiguos como la razón principal para no hacerlo. Supongo que esas faltas técnicas en mi flujo de trabajo han sido una bendición disfrazada ya que me estimulan a dejar de mirar la fotografía desde un simple punto de vista técnico. La verdad es que en estos días, cuando se trata de este tipo de sesiones de fotos, solo estoy disponible ciertas noches específicas, así que en este momento, o hago lo que puedo cuando puedo, o no lo hago; y pues no alimentar mi apetito creativo nunca es una opción.